Napo
Valle del Río
Quijos
La entrada a la Amazonía
El Valle de Quijos se ubica entre tres parques nacionales: Parque Nacional Cayambe Coca, Parque Nacional Antisana y Parque Nacional Sumaco-Galeras. Es la puerta de entrada a la Amazonía ecuatoriana.
ReforestemosEcuador respalda un proyecto que nace de la iniciativa del grupo Observadores de Aves Birdwatchers Valle del Quijos. Esta iniciativa busca resaltar las maravillas naturales, la biodiversidad, los lugares arqueológicos y la rica cultura del Valle de Quijos. El propósito es que los residentes puedan complementar su dependencia de la agricultura y la ganadería con el ecoturismo, como una opción sustentable para el progreso de sus comunidades. En alianza con fincas locales, se han plantado los primeros 5000 árboles. El proyecto está enfocado en desarrollar un área de lombricultura para producir humus y mejorar la calidad de la plantación
Árboles Plantados
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Ubicación
- Fortalece la economía local.
- Mejora la conectividad entre áreas protegidas.
- Recuperación de hábitats para la fauna nativa.
- Contribuye a la captura de carbono, ayudando a combatir el cambio climático.
Superficie: Se plantea una meta de plantar 50,000 árboles, continuando el éxito inicial de 5,000 árboles plantados
Ubicación y Altitud: 0° 22′ 38″ S, 77° 50′ 43″ W, 1.696 m
Flora y fauna
El Cedro (Cedrella Montana), porotón (Erytrina Edulis), junto con guabas y guabillas (Inga sp), guantug (Brugmansia sp), y variedades como palmas, laurel, ztanco, canelo, choto, aliso, y tilo, conforman la rica diversidad botánica del Valle. Esta región, bendecida con biodiversidad, alberga a 288 especies distintas de aves.
Es preocupante señalar que entre la fauna del área, el tapir de montaña (Tapirus pinchaque), el oso de anteojos (Tremarctos ornatus) y el águila andina (Spizaetus Isidori) están catalogadas en peligro, lo que resalta la urgencia de acciones conservacionistas en la zona.
Amenazas
El Valle de Quijos, una joya de biodiversidad en el corazón de la Amazonía, enfrenta crecientes amenazas a su riqueza natural debido a la rápida expansión de la frontera agrícola. Esta tendencia, impulsada por el deseo de satisfacer la demanda mundial de alimentos y materias primas, está causando la pérdida de hábitats únicos, poniendo en peligro a numerosas especies endémicas del valle. Además, la alteración de estos ecosistemas vitales puede desencadenar un desequilibrio en los recursos hídricos de la región, afectando tanto a la fauna silvestre como a las comunidades humanas que dependen de ellos.
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